Panrico está abocada a solicitar el concurso de acreedores tras la ruptura de las negociaciones
Panrico baraja ya la solicitud de concurso de acreedores en los próximos días ante la incapacidad de generar ingresos recurrentes y tras romperse las negociaciones entre los sindicatos y la dirección de la compañía, que ha visto rechazado su plan industrial, según han informado fuentes cercanas.
"Llegados a este punto no hay más opción que el concurso ante la incapacidad de generar ingresos recurrentes y porque cuesta más producir un 'donuts' que venderlo", han señalado las mismas fuentes, que han precisado además que no es lógico que Panrico, con una deuda financiera de aproximadamente seis millones de euros, tenga 70 centros de distribución logística, más que empresas como Danone o Coca-Cola.
El plazo límite para llegar a un acuerdo expira esta semana, por lo que a falta de dos días para lograrlo, Panrico no tiene más remedio que acogerse al concurso de acreedores, casi dos mes después de solicitar el 'preconcurso', ya que se encuentra sin capacidad financiera para poder aguantar más tiempo.
Tras más de veinte horas de reunión, el 'frenazo' en las negociaciones se ha debido a la falta de consenso entre los sindicatos para apoyar un preacuerdo definitivo de Panrico y de un apoyo mayoritario al mismo.
Durante la reunión, según han explicado fuentes sindicales a Europa Press, la mayoría de la mesa estaba dispuesta a firmar el precauerdo, con el respaldo de seis delegados de UGT y uno de CCOO, si bien la compañía consideró que esta mayoría no era "suficiente, ni cualificada" para respaldar el acuerdo y optó por levantarse de la mesa.
Las mismas fuentes han señalado que durante el día de hoy ambas partes 'quemarán el último cartucho' y volverán a reunirse para intentar lograr el respaldo suficiente al acuerdo definitivo.
Condiciones del preacuerdo
El preacuerdo contemplaba extinciones de un máximo de 745 trabajadores, que se realizarán en los ejercicios 2013, 2014, 2015 y 2016. En función de la buena evolución del negocio las extinciones laborales en los años 2015 y 2016 podrían realizarse o no.
Las indemnizaciones alcanzarán los 25 días de salario por año de servicio con un máximo de 14 mensualidades. Debido a la "grave situación financiera" de la compañía, dichas indemnizaciones podrán ser abonadas en un plazo máximo de 18 meses a contar desde la fecha de efectividad de los despidos. En cualquier caso, la empresa dispondrá las garantías suficientes que se asegure el percibo de dichas indemnizaciones.
Para el resto de trabajadores afectos al convenio se aplicará, según recoge el preacuerdo, una reducción salarial de hasta un máximo del 18% para los salarios correspondientes a los meses de octubre, noviembre y diciembre de este año.
Desde la compañía no han querido realizar ningún tipo de declaración sobre su situación futura.