El juez Castro se carga de indicios para
imputar a la infanta Cristina
El juez cuenta con tres informes que prueban que la hija del rey tuvo acceso al dinero negro que acumuló su marido
Un error en la información remitida por La Caixa impidió que los investigadores llegaran antes a esa conclusión
El empedrado camino para la imputación, por primera vez en la historia, de un miembro de la familia real española pareció este miércoles allanarse de forma inesperada. El juez José Castro cuenta ahora con un nuevo argumento para interrogar como imputada a Cristina de Borbón: tres informes prueban que la hija del rey tuvo acceso al dinero que obtuvo ilícitamente su marido, Iñaki Urdangarin. Con menos indicios, Castro dictó hace seis meses un auto citando a declarar a la infanta como imputada en el 'caso Nóos'.
El pasado 30 de septiembre, los servicios jurídicos del BBVA enviaban al Juzgado de Instrucción número 3 de Palma un informe sobre la actividad de una tarjeta de crédito de la mercantil Aizoon a nombre de Doña Cristina de Borbón. La relevancia el uso de esa tarjeta radica en su titular, la empresa que poseen a partes iguales los duques de Palma, y que, según la investigación, sirvió para esconder parte de los fondos obtenidos irregularmente por Iñaki Urdangarin a través del Instituto Nóos, una ONG que obtuvo 5,8 millones de los Gobiernos del PP en País Valencià e Illes Baleares por apenas hacer nada. Con esa tarjeta, Cristina de Borbón pagó en restaurantes, compró flores y adquirió los libros de texto de sus hijos, entre otros usos.
La defensa de Cristina de Borbón mantiene que los manejos de Urdangarin eran ajenos a la infanta, incluidos los referentes a Aizoon, a pesar de que la infanta era dueña de la mitad de la empresa y aparecía como titular en la cuenta de constitución de la sociedad, allá por 2003. La Audiencia Provincial de Palma suspendió el 7 de mayo la citación a la hija del rey, pero dejó la puerta abierta a que fuera en un futuro imputada por fraude a Hacienda y blanqueo de capitales. En su auto, los jueces dejaban un recado al Ministerio de Hacienda: su investigación sobre el papel de Cristina de Borbón presentaba “zonas oscuras”. Pero un mes después, el departamento que dirige Cristóbal Montoro insistió en que los únicos responsables del entramado delictivo eran Urdangarin y Diego Torres. Con esa taxativa afirmación dejaban fuera a la infanta y anulaban el argumento del exsocio del duque de Palma, resumido en "si mi mujer está imputada, ¿por qué la de Iñaki no?".
Los informes sueltos
Pero eso no fue suficiente para quebrar la determinación del juez Castro, que ya caminaba en dirección opuesta al fiscal Anticorrupción, Pedro Horrach, con el que había ido de la mano desde el inicio del caso Palma Arena, la matriz de Nóos. En los últimos días, un nuevo indicio afloró entre los 10.000 folios de sumario. No se trataba de un informe adicional. La pista llevaba allí, entre los tomos, desde hacía tiempo. Se trata de un informe policial de 18 de junio de 2012 que contenía un análisis de los movimientos de una cuenta de Aizoon en el BBVA. Según ese apunte, a los pocos días de que Urdangarin dejara, solo formalmente, el Instituto Nóos, se produjo una salida de esa cuenta de 150.000 euros a una cuenta de La Caixa, en dos tiempos (125.000 más 25.000). Otro informe, este de marzo de 2012 y firmado por la Agencia Tributaria, decía que en esa cuenta figuraba como autorizada Cristina de Borbón. El Grupo de Delincuencia Económica de la Policía cruzó recientemente ambos informes y alcanzó un nuevo indicio de blanqueo: la infanta tuvo acceso al dinero negro. Un error de La Caixa en informar del número de cuenta impidió llegar antes a esa conclusión. Esa cuenta es la misma que utilizó la pareja para pagar la hipoteca suscrita por el préstamo de cinco millones para reformar Pedralbes, préstamos de su majestad al margen.
¿Ayudó a blanquear la infanta el dinero del delito? El juez aguarda nuevas conclusiones de la Agencia Tributaria y un informe de la Policía sobre el modo en que el matrimonio pagó la reforma y el mantenimiento del palacete de Pedralbes. Datos remitidos a finales de septiembre por los peritos al juez Castro apuntan a que el matrimonio cargó la reforma de la casa a la empresa que ocultaba el dinero negro.
¿Y el posible fraude a Hacienda? En ese mismo informe de la delegación catalana de la Agencia Tributaria apuntaba que Cristina de Borbón cobró de su propia sociedad, Aizoon, por el alquiler de Pedralbes. Con los datos aún por llegar, Castro decidirá en las próximas semanas si sienta a declarar ante él a la hija del rey.