Fagor Electrodomésticos plantea cerrar 8 de sus 12 plantas y aliarse con la empresa china Haier
El plan de viabilidad de la cooperativa contempla trasladar toda su producción a Polonia, debido a los costes más bajos, y recortar la plantilla de 5.700 a 3.000 trabajadores.
El proyecto de reestructuración necesita una inyección económica de 247 millones de euros y se basa en un importante apoyo público de más de 120 millones de los Gobiernos central y vasco.
Las cinco plantas de Euskadi quedarían reducidas a una, en la localidad de Mondragón, y los 2.000 empleos en el País Vasco se rebajarían hasta el millar.
Fagor Electrodomésticos prevé cerrar ocho de sus 12 plantas actuales, trasladar toda su producción a Polonia y asociarse con la empresa china Haier. Estas medidas se reflejan en su plan de viabilidad para mantener la empresa, que necesita de una inyección económica de 247 millones de euros, y supondría adelgazar la plantilla casi a la mitad: de los 5.700 empleados actuales a cerca de 3.000. La compañía no quiso comentar ayer estos datos. “No vamos a dar datos del plan de viabilidad”, asegura un portavoz oficial.
La empresa insignia del Grupo Mondragón (el primer grupo empresarial vasco y el séptimo de España con 80.000 trabajadores) trabaja contrarreloj para hacer frente al agujero económico que se ha ido agrandando los dos últimos años. En 2010 tuvo pérdidas de 89 millones de euros y en los primeros seis meses ha sumado otros 66,8 millones.
La crítica situación ha llevado a plantear decisiones drásticas. Según los datos a los que ha tenido acceso El Diario Norte, supone un giro total en la estrategia de Fagor Electrodomésticos, que contempla clausurar gran parte de sus plantas actuales: de las cinco en Euskadi quedarían en solo una en Mondragón, las cinco francesas también se reducirían a una y a la existente en Polonia se agregaría otra, y en la sociedad entraría al 50% del capital la multinacional china Haier, el tercer fabricante mundial de electrodomésticos con la mayor cuota mundial como marca, con el 7,8%. Así, la producción quedaría solo en Polonia, donde los costes son sensiblemente inferiores.
El otro cambio significativo del plan de viabilidad es la alianza con Haier, que, según el plan, paga 25 millones por la participación en la empresa de Polonia. En este caso, su entrada no plantea problemas ya que es una sociedad anónima, a diferencia de lo que ocurre con el grueso de Fagor Electrodomésticos, una cooperativa que complica sobremanera la entrada de socios externos. Haider lograría así su vía de entrada en el mercado europeo mientras que a la cooperativa vasca se le abre la posibilidad de acceder a nuevos mercados.
El recorte de personal sería importante, al quedarse con 3.000 empleados. De ellos, un millar en Euskadi, la mitad de los existentes actualmente, aunque la apuesta es mantener el máximo número de empleos en la comunidad autónoma. La actividad en el País Vasco no sería ya de producción sino de ingeniería y otros servicios de innovación. El plan se basa también en un importante apoyo institucional, con ayudas de más de 120 millones de los Gobiernos vasco y central.
Fagor Electrodomésticos ha visto reducido su negocio, en una línea similar a sus competidores europeos, en un 33% en los últimos seis años: de los 1.750 millones que facturó en 2007 ha pasado a los cerca de 1.200 en 2012, más de 550 millones menos. El pasado mes de mayo, la Corporación Mondragón aprobó por unanimidad la creación un fondo de reestructuración y empleo societario de apoyo a la cooperativa de 70 millones de euros, así como una rebaja salarial de casi el 6,5%, que se unía a la renuncia de la paga extraordinaria de verano. Ahora se ha pedido de nuevo la ayuda del grupo, que se canaliza a través de Mondragón Inversiones, que a día de ayer aún seguía analizando la solución. “Se sigue trabajando intensamente”, ha afirmado un portavoz oficial. El lunes hubo una reunión de casi ocho horas.