Medel se jubila clandestinamente en la Seguridad Social para asegurarse una pensión privada de 1,2 millones
El presidente de Unicaja es un pensionista más, desde hace unas semanas. Su jubilación de la Seguridad Social le garantiza una pensión vitalicia privada de dos veces su sueldo como banquero, merced a dos pólizas de 600.000 euros aprobadas por el consejo de la caja malagueña.
Presidente de Unicaja y, sin embargo, pensionista de la Seguridad Social. Braulio Medel ostenta esa doble condición desde hace unas semanas, después de haber tramitado su jubilación ante laDirección Provincial del Instituto de la Seguridad Social de Málaga y comenzar a percibir la correspondiente pensión pública, según confirman fuentes del Gobierno andaluz. Medel, que cumplió 66 años el pasado mes de agosto, ha realizado estos movimientos sin informar, ni explicar los motivos de tal decisión al Consejo de Administración de Unicaja Banco.
Ya el pasado año, tras cumplir los 65 años, Medel consultó en el INSS (Instituto Nacional de la Seguridad Social) la posibilidad de jubilarse y continuar desempeñando la presidencia ejecutiva de Unicaja Banco. Entonces no fue posible. Sin embargo, ahora sí lo permite un cambio normativo. El Gobierno reguló, el pasado mes de marzo, mediante el Real Decreto 5/2013 la continuidad laboral de las personas que alcanzan la edad de jubilación.
Así, las personas que se acojan a dicha posibilidad, mientras realicen otra actividad laboral, sólo reciben el 50% de la pensión de jubilación que les corresponde y continúan percibiendo el total de sus retribuciones privadas. En consecuencia, Medel, acogiéndose a la literalidad de la norma, percibirá la mitad de la pensión máxima actual de la Seguridad Social, cifrada en 35.673 euros. Por tanto, el banquero sevillano complementará su retribución anual de 600.000 euros, como máximo responsable de Unicaja, con los 17.836 euros provenientes de su pensión pública.
El asunto de la jubilación de Medel no es baladí para sus finanzas personales. El banquero hispalense, además de tener fijada unaindemnización de dos anualidades si fuera cesado como presidente de Unicaja Banco antes de 2017, mantiene dos pólizas de seguros suscritas con Allianz y Mapfre en 2002 y 2006, que le garantizan la percepción de una pensión vitalicia de dos veces su sueldo (o un pago único del capital equivalente).
Pero para poder hacer efectivas las cantidades aseguradas es condición de ambas pólizas que el asegurado (Braulio Medel) tiene que jubilarse, como ha sucedido recientemente.
Así que nada más sibilino que jubilarse parcialmente, como le permite la nueva ley aprobada en marzo, y continuar al frente de Unicaja, en sus dos versiones (banco y caja). De esta manera, Medel se asegura el cobro de la pensión vitalicia privada de 1,2 millones cuando cese en Unicaja Banco.
Sin avisar al Consejo de Administración para evitar riesgos
Condición indispensable para ello era no informar al Consejo de Administración de Unicaja Banco de su solicitud de jubilación, pues muchos consejeros proceden del antiguo Consejo de la Caja de Ahorros que aprobó la contratación de ambas pólizas de seguro y podrían oponerse a su continuidad. Además, Medel corría el riesgo de que los consejeros disidentes, como por ejemplo los delPartido Popular, informaran de la finalidad de la jubilación de Medel al fiscal anticorrupción.
Dos son los motivos, según fuentes del sector, que han impulsado a Medel a tomar esta decisión. Por una parte, el abandono de su amigo y protector José Antonio Griñán y la llegada a la Junta de Andalucía de un grupo abiertamente hostil a su persona, unido a las dificultades de cerrar la adquisición del Banco CEISS y su creciente enfrentamiento con el Banco de España, FROB y Ministerio de Economía que ha llegado la pasada semana a un punto de casi no retorno.
De hecho, el supervisor ha insinuado a Medel que podría tomar algún tipo de medida sobre su futuro al frente de la entidad malagueña ante el aquilatamiento de la fusión entre Unicaja y CEISS, según aseguran fuentes del sector.
El segundo motivo que ha llevado a Medel a jubilarse son lascrecientes imputaciones de exdirectivos de las cajas de ahorroscon motivo de la percepción de indemnizaciones millonarias por sus ceses en las mismas.