Hacienda perdonó 3,43 millones a Terra Mítica una semana después de venderse
El empresario de origen argelino Georges Santa-Maria, propietario del parque temático Terra Mítica desde el 27 de junio de 2012, es un hombre con suerte. Solo ocho días después de firmar la compra del 70 por ciento de la empresa a la Generalitat valenciana, Bancaja, CAM y Banco de Valencia por 65,05 millones de euros, Terra Mítica recibió una resolución del Tribunal Económico-Administrativo Central (TEAC), dependiente del Ministerio de Hacienda, que admitía el recurso de alzada interpuesto 15 meses antes contra un recargo de apremio por importe de 3,43 millones, que quedaba así anulado.
Terra Mítica se apuntó por ello un beneficio extraordinario por esa suma, lo que le ayudó a reducir sus pérdidas de 11,08 en 2011 a 6,71 millones el año pasado, según las cuentas depositadas en el Registro Mercantil. Estas cuentas no incluyen la explotación del parque temático, que está subcontratada desde 2010 a otra empresa de Georges Santa-Maria, Ocio y Parques Temáticos, filial de Aqualandia, cabecera del grupo de ocio del empresario afincado en Benidorm (Alicante).
Según relata la memoria de Terra Mítica, el recargo de apremio tuvo su origen en una reclamación del Ministerio de Hacienda que le obligaba a devolver 14,58 millones de Fondos Feder concedidos en 1999, por no haber cumplido los objetivos de creación de empleo.
El incumplimiento fue detectado por la Dirección General de Fondos Comunitarios en 2006. Con los intereses de demora y el recargo de apremio, la cantidad que debía devolver la entonces empresa semipública alcanzó los 22,46 millones en 2008, por lo que la Agencia Tributaria le concedió un aplazamiento garantizado con un derecho de prenda sobre atracciones del parque.
Recurrió hasta Estrasburgo
La suerte que Georges Santa-Maria tuvo con el TEAC no le sonrió en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, con sede en Estrasburgo, que en octubre de 2012 inadmitió el último recurso planteado por Terra Mítica para anular la sanción de Hacienda, tras haber agotado los recursos ante el Supremo y el Tribunal Constitucional.
Al tiempo que interponía los sucesivos recursos, la empresa fue pagando los plazos pactados con la Agencia Tributaria, con un total de diez fracciones, dos por año, de la que en diciembre de 2012 quedaba por pagar la última, de 4,46 millones. Este pago se suspendió a petición de la empresa tras la resolución del TEAC. Lógicamente, a esa cantidad habrá que restarle los 3,43 millones perdonados al anularse el recargo de apremio.
Cuando salde esa deuda y los 15 millones que debe a la empresa pública Sociedad Proyectos Tematicos de la CV (SPTCV), a liquidar el próximo 31 de diciembre, Terra Mítica será una empresa prácticamente sin deuda, tal como se comprometió Georges Santa-Maria cuando la adquirió.
Para ello, tras la compra realizó una ampliación de capital de 65 millones, con la que Aqualandia aumentó su participación del 70 al 78 por ciento. El resto es de accionistas minoritarios a los que Eduardo Zaplana embarcó en el proyecto hace 15 años.
Costó más de 400 millones
La venta de Terra Mítica, que había costado más de 400 millones, la mayoría perdidos tras la suspensión de pagos de 2004, se cerró por el equivalente compromiso de Aqualandia de asumir la deuda de 65 millones.
Según la sindicatura de Comptes de la Generalitat, a SPTCV, que tenía un 22,31 por ciento, la operación le causó unas pérdidas de 43,97 millones, a expensas de la recuperación que pueda obtener del variable pactado, vinculado a la obtención de beneficios fiscales y plusvalías inmobiliarias por parte del comprador.
Las cuentas de Terra Mítica no muestran los resultados de explotación del parque temático, de los que la empresa tampoco informa. No obstante, se advierte una ligera reducción en la facturación en 2012 respecto al año anterior, ya que los ingresos por canon variable cobrados a la empresa que explota el complejo se redujeron un 13 por ciento, hasta 313.874 euros.
Anuncia tres hoteles
El presidente de Terra Mítica y propietario del grupo Aqualandia anunció hace varias semanas su intención de construir tres hoteles en terrenos propiedad del parque temático, que estaban previstos en un principio para la ampliación del complejo.
"Benidorm merece tener 50 nuevos hoteles de cara al próximo año, de unas 300 habitaciones cada uno, lo que supondrán dar servicio a más de 60.000 personas", afirmó el empresario afincado en la capital turística de la Comunidad Valenciana.
Santa-María Group posee los parques Terra Mítica, Aqualandia y Mundomar, todos ellos en Benidorm, donde también tiene otros negocios relacionados con el ocio y el turismo. Los hoteles que el grupo quiere construir se sumarían a los que ya se construyeron en terrenos que formaban parte del complejo de ocio y que fueron expropiados por la Generalitat, a través de la empresa pública SPTCV, y adjudicados en 2001 a grupo hoteleros mediante una concesión de 75 años.
Uno de ellos fue Royal Mediterránea, que edificó un complejo de lujo denominado Asia Gardens con dos hoteles, uno de cuatro y otro de cinco estrellas. El otro fue Xeresa Golf, que construyó el complejo Villaitana, con dos hoteles y dos campos de golf. Esta empresa entró en 2010 en concurso de acreedores, del que salió en 2012.