Sacyr donó 60.000 euros al PP un mes antes de ganar el contrato de Toledo
La adjudicación de un contrato a la empresa Sufi S.A. en 2007 para que se encargara de la recogida de basuras de Toledo durante 14 años encierra datos que generan nuevas dudas sobre ese procedimiento, más allá de las que ha señalado el propio Luis Bárcenas. El Mundo recogió unas supuestas declaraciones del extesorero del Partido Popular en las que este aseguraba que, a cambio de esa concesión del Ayuntamiento de Toledo, Sufi S.A. donó a la formación 200.000 euros. Según Bárcenas, la encargada de gestionar esa operación fue la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal. La dirigente ha negado rotundamente esos hechos y ha ampliado su querella anterior contra el extesorero para incluir esta otra imputación.
Lo cierto es que en pleno proceso de adjudicación de ese contrato para la recogida de basuras en Toledo, durante el mandato del alcalde popular José Manuel Molina, los papeles de Bárcenas reflejan una suculenta donación al partido de Luis del Rivero, el hombre que en esos momentos ocupaba la presidencia de Sacyr, propietaria de Sufi S.A., cuando se celebró el concurso.
En concreto, la presunta contabilidad del PP, depositada en la Audiencia Nacional y autentificada por los peritos caligráficos, menciona un ingreso de 60.000 eurosabonados por el máximo responsable de la constructora el 6 de noviembre de 2006,en medio del concurso municipal que debía elegir a la empresa que se haría cargo del servicio de residuos urbanos durante los siguientes 14 años. Rivero, que se encuentra imputado en el caso Gürtel por este presunto pago, negó en su declaración en la Audiencia Nacional haber realizado entrega alguna al Partido Popular.
Una valoración de ofertas a través de una firma externa
Con todo, sólo mes y medio después de esa supuesta donación recogida por los papeles de Bárcenas, el 21 de diciembre, la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Toledo acordó en una sesión extraordinaria conceder a Sufi S.A. la adjudicación del servicio de basuras. Y tres semanas después, el 17 de enero, se rubricó el contrato.
La Mesa de Contratación y Comisión de Valoración municipal concluyó que la oferta de la filial de Sacyr era la más competitiva. Sin embargo, según fuentes cercanas al proceso, el estudio de las diferentes ofertas que se presentaron al concurso lo efectuó en realidad una empresa externa contratada exclusivamente por el Ayuntamiento para desarrollar esta función, un método inusual sin antecedentes en el Consistorio de Toledo. De hecho, hasta ese momento, la valoración de ofertas siempre la habían realizado técnicos municipales. Pero en esta ocasión se le encargó el análisis de propuestas a Consultoría de Gestión Empresas S.L., un pequeño despacho local. Su estudio otorgó a Sufi S.A. la mayor puntuación. La anterior concesionaria, Urbaser, quedó en el quinto puesto.
El importe de la concesión era millonario. El coste anual ascendía a 6,1 millones de euros. No obstante, lo más interesante era el plazo de vigencia. En principio, los pliegos del concurso detallaron que el contrato tendría una validez de siete años prorrogables por otros siete. Pero a última hora se modificaron las condiciones y el acuerdo se firmó por 10 años fijos prorrogables por otros cuatro. Sufi S.A., que en la actualidad opera con la marca Valoriza, sigue prestando ese servicio en Toledo y no dejará de hacerlo hasta 2021. Al final del periodo, la compañía habrá ingresado por la concesión un mínimo de 85,4 millones de euros.
Un segundo contrato por 1,4 millones
El importe total será mucho más alto. Según fuentes cercanas al servicio, desde que logró la adjudicación la compañía ha logrado varios reequilibrios en el contrato que han elevado sus ingresos anuales hasta los 8 millones de euros.
El Confidencial informó este jueves de que el contrato para la recogida de basuras no fue el único que consiguió Sufi S.A. en ese periodo. En marzo de 2007, después de un proceso de adjudicación cerrado en tiempo récord y sólo dos meses antes de que se celebraran las elecciones municipales, el Ayuntamiento de la capital castellano-manchega otorgó otra concesión a la filial de Sacyr para que se hiciera cargo delmantenimiento de los viales del municipio, un servicio que nunca antes se había prestado en la localidad. El contrato se prolongó durante cuatro años y la constructora consiguió unos ingresos adicionales de 1,4 millones de euros.