Los críticos del PSC retienen el escaño y se sitúan al borde de la expulsión
La exconsejera Marina Geli niega que se propongan crear un nuevo partido
- La consulta soberanista rompe al PSC
Los tres diputados del PSC que votaron el pasado jueves en el Parlamento catalán a favor de pedir competencias al Congreso para que se celebre una consulta soberanista consumaron este domingo su anuncio y desoyeron la petición que les hizo Pere Navarro para que renuncien al escaño. Cruzado este río, se abre ahora un nuevo escenario en el que la dirección del PSC ha anunciado que adoptará medidas disciplinarias de “consecuencias definitivas”.
La expulsión del partido y del grupo parlamentario de Joan Ignasi Elena, Marina Geli y Núria Ventura sería la más drástica de todas las posibles, pero la dirección socialista se negó este domingo a avanzar la concreción de la doble sanción: por la ruptura de la disciplina de voto (pues el resto de los diputados socialistas apretaron el botón del no) y por la negativa a entregar el acta de diputado. La primera corresponde al grupo parlamentario y la segunda a la comisión de garantías del PSC, que preside el exteniente de alcalde de Barcelona Joan Torres y de la que forman parte cinco federaciones del PSC. Esta comisión puede actuar de oficio o a requerimiento de cualquier militante.
Navarro, primer secretario del PSC, no ha hablado con los tres diputados críticos desde la víspera de la votación, cuando estos le comunicaron que romperían la disciplina de voto. Navarro les pidió el sábado que entregaran el acta, que ya les habían reclamado el portavoz del grupo, Maurici Lucena, y el secretario de acción política, Antonio Balmón. En declaraciones a EL PAIS, Balmón insistió en reclamar “alturas de miras” a los tres diputados: “Son solo ellos quienes han de decidir si cierran la puerta y se quedan dentro o fuera”, afirmó.
Los diputados críticos, por su parte, insisten en rechazar las prisas para resolver la crisis. “Lo que no se puede hacer es poner el reloj en marcha, sino actuar con más moderación”, dijo Joan Ignasi Elena. Marina Geli reclamó un comité de crisis y que el tema se debata en la ejecutiva del día 27.
La dirección del PSC rechaza el aplazamiento y se da por seguro que hoy moverá ficha. Pere Navarro no tiene prevista ninguna reunión con los diputados críticos y considera que está cargado de razones para actuar contra ellos porque han desobedecido un acuerdo del consejo nacional, el máximo órgano entre congresos. Mientras, los diputados críticos recuerdan que el PSC llevaba en su programa la defensa de una consulta legal y pactada, que es lo que pretende el acuerdo del Parlamento catalán: que se transfiera la competencia a la Generalitat para convocar un referéndum. “Carme Chacón también rompió la disciplina de voto del PSC el 26 de febrero de 2013, cuando se votó en Madrid la consulta, y nadie le pidió que renunciara al escaño”, dice un dirigente crítico.
La presidenta del Parlamento catalán, Núria de Gispert, aplaudió la “valentía” de los tres diputados díscolos del PSC por votar “en conciencia con lo que creían que estaba en el programa electoral de su partido”, informa Europa Press.