SALIR DEL EURO, ES FUNDAMENTAL
“La mejor solución posible sería explicar a nuestros ciudadanos por qué los miles de millones en ayudas son inevitables. Los rescates son primero y ante todo, no para los países en problemas, sino a nuestros propios bancos. Que tienen grandes cantidades de crédito allí”
Peter Böfinger, asesor económico del gobierno alemán y profesor de economía de la Universidad de Wurzburgo, declaraciones a Der Spiegel.
“En realidad esta crisis es al menos en parte (quizás la mayoría) culpa de los bancos de los países ricos como Francia y Alemania y son esos bancos los que han sido rescatados por el BCE y el FMI”
Pratap Chatterjee, periodista británico, mayo de 2012.
“Si un país o región no tiene el poder de devaluar, y si no es beneficiario de un sistema de nivelación fiscal, entonces no hay nada que impida sufrir un proceso que conduzca a un descenso acumulado y terminal, al final, [queda] la emigración como única alternativa a la pobreza o el hambre”
Wynne Godley, economista británico, 1926 – 2010, 8 de octubre de 1992.
No debemos tener miedo. Debemos huir de la represión financiera. España está sufriendo un estrangulamiento financiero por parte de la UE. El dinero va a los bancos quebrados, saliendo directamente a los aun más quebrados bancos alemanes y se deja sin financiación a la economía real. Estamos durmiendo con nuestro enemigo, víctimas inermes de una especie de síndrome de Estocolmo o un maltrato emocional. Tenemos todos los síntomas. Y los medios de comunicación españoles están a su servicio haciendo un trabajo de propaganda y desinformación esencial para mantenernos en la oscuridad, mientras perpetran el saqueo de España.
Nos infunden terror, desesperanza o culpabilidad. Todo es parte de un juego para amedrentarnos y manipularnos. Dicen que después del euro no hay nada, pero es mentira. El euro es una unión monetaria más como otras cientos que hubo anteriormente, y que ya murieron, pero la vida continúo. El euro es una cárcel y mantenernos en él en las condiciones actuales es dirigirnos inexorablemente al subdesarrollo y el atraso. El euro hoy sólo tiene el objetivo de expoliar los recursos nacionales en favor de intereses especulativos y corporativos tanto empresariales como de clase. Los mismos intereses de la plutocracia que provocaron la debacle financiera. Los mismos intereses de los grupos de presión – lobbies – corporativos que determinan las políticas aplicadas comprando a los corruptos políticos o, ya mucho antes éstos a su servicio, europeos y estadounidenses.
Argentina es un claro ejemplo de las ventajas de tener tu propia moneda y una relativa independencia económica. Dirigir tu destino y que no te lo dicten intereses extranjeros. El golpe fue duro por amarrarse al dólar. Fue como el euro la ilusión de crecimiento de una economía desindustrializada y especulativa. Tenía fecha de caducidad, era inevitable que colapsara. Un golpe duro, es cierto. Una caída abrupta por empeñarse en aplicar ajustes estructurales que perjudican de forma cruel e innecesaria – a no ser que sea enriquecer a la misma minoría de siempre – a la población. Pero, desde entonces Argentina no ha hecho más que mejorar y como les gusta a los “ortodoxos” de la economía: crecer.
Argentina se sumió en una crisis brutal: el paro ascendió al 27%, la pobreza afectó a casi el 60% de la población y la indigencia, al 30%. Un corralito y estrangulamiento financiero. Todo esto en menos de un año (20 de diciembre de 2001 – septiembre de 2002). Pero desde 2003, el desempleo se ha reducido al 8%, la pobreza al 30%, tienen superávit comercial y fiscal y, han crecido a tasas por encima del 8% durante 9 años, casi cada uno de ellos. El poder adquisitivo real – descontada la inflación – de la población se ha elevado un 40% desde 2003, mientras que en España – tan europeos y del primer mundo que somos – lleva 30 años cayendo.
En Argentina queda mucho por hacer, muchos lazos con el pasado no se han roto y nadie pagó por sus crímenes, pero seguir en el dólar como para España seguir en el euro, hubiera sido/es una lenta agonía, tasas pobreza por encima del 50%, tasas de paro de más del 30%, porque los ajustes y reformas estructurales son el subdesarrollo y la pobreza para 2/3 de población. España es simplemente una víctima más del juego. Para algunos países latinoamericanos nada fue más positivo que no cumplir los deberes del FMI. De los tecnócratas. Desde 1999, la pobreza cayó 14 puntos, el promedio de los salarios reales creció un 15%, se invierte en educación, sanidad e inclusión social. Pero esos países que se rebelaron, que desobedecieron al sentido común que les hundió en la miseriason vilipendiados, difamados y desestabilizados dentro y fuera, incluso por los medios y gobiernos españoles, porque, esos países son un peligro. Ellos muestran la luz al final de túnel. Muestran que el recorrido inverso a los ajustes y recortes asimétricos es viable, es una vida más digna.
“Si un gobierno deja de tener su propia moneda, no solo pierde su control sobre la política monetaria, su poder de gasto también se reduce. Si un Gobierno no tiene su propio banco central del cual obtener financiación gratis, sus gastos deben ser financiados a través de préstamos en el Mercado y esto puede ser excesivamente caro o imposible.El peligro es que la restricción presupuestaria a la cual los Gobiernos están sometidos, creara una situación deflacionaria que llevara a Europa, en su conjunto, a una Depresión” Wynne Godley, 31 de agosto de 1997.
Sólo hay que ver el camino griego ante el sadismo y el afán de rapiña del norte de Europa y EEUU. No diremos que va a ser fácil. Nos desestabilizarán, nos amenazarán con todo tipo de males como hacen siempre los matones desesperados, pero quien pierde realmente son ellos porque nosotros recuperaremos nuestra soberanía, nuestra política económica y nuestras empresas estratégicas, hoy como Iberia desmanteladas. Ellos en cambio perderán como mínimo 400.000 millones de euros – creados de la nada – que utilizaron para especular y reventar el mercado financiero ante la irresponsable inacción o peor, connivencia de nuestros corruptos dirigentes – como igualmente hicieron antes en Latinoamérica, África, Rusia, México o el Sudeste Asiático – y que ahora quieren que les devolvamos con nuestros impuestos, nuestro país y nuestras vidas.
Ahora que asuman sus teorías, sus prédicas, que enfrenten el riesgo moral, igual que lo enfrentan los desahuciados y desposeídos por ellos. Desnudemos su doble moral. Librémonos del complejo de inferioridad que nos han inoculado y nos atenaza. De falsas acusaciones de pereza, cuando aquí se trabaja más y en peores condiciones. Cuando durante los últimos 30 años nos hemos venido empobreciendo silenciosamente. Cuando fuimos expulsados del mercado de la vivienda por sus mecanismo especulativos. Se corrompieron, pues que pierdan. Sabían muy bien lo que se venía encima con el inmobiliario. Y si quieren su dinero, pues les daremos sus ladrillos. Hay vida fuera del euro y es la única posible. El euro es un suicidio, una agonía, una muerte lenta e inexorable para los españoles.
Siempre es mejor irse, que, que te echen. Es preferible dirigir tu destino, tomar la iniciativa resueltamente, que ser una marioneta.