La extracción de gas provoca un terremoto de casi 4 grados frente a Vinarós
El proyecto Castor, con una inversión de 1.200 millones de euros, ha generado 252 micro-seísmos que hasta ahora no habían sido percibidos por la población
Un terremoto de 3,9 grados en la escala de Richter, el mayor de los más de 250 micro-seísmos producidos hasta ahora por el proyecto Castor, se ha registrado esta madrugada sin causar daños frente a la costa del norte de Castellón y sur de Tarragona, ha informado la Dirección General de Protección Civil.
Según datos del Instituto Geológico de Cataluña, el sismo se ha producido a las 04.21 minutos a una profundidad de 5 kilómetros frente a la costa de Vinaròs (Castellón) y, aunque ha sido percibido por algunos ciudadanos en Sant Carles de la Rápita (Tarragona), no ha causado daños.
Protección Civil ha confirmado que apenas se han recibido un puñado de llamadas al teléfono 112 por ciudadanos que han notado el seísmo.
El proyecto Castor, con una inversión de 1.200 millones de euros, trata de aprovechar un antiguo pozo petrolífero a 1.750 metros de profundidad bajo el nivel del mar para suministrar hasta un tercio de la demanda de gas del sistema durante 50 días, pero, al parecer, la inyección de gas está provocando desde el pasado 13 de septiembre numerosos micro-terremotos, que hasta ahora no habían superado los 3,6 grados de magnitud.
De hecho, según el Instituto Geológico de Cataluña, ayer también se produjo un sismo de 3,6, la misma magnitud del que se originó el pasado 23 de septiembre, mientras que el resto de temblores no han superado los 3 grados.
A raíz de estos micro-terremotos, el Ministerio de Industria, Energía y Turismo ordenó la pasada semana el cese temporal de la actividad en el almacenamiento subterráneo de gas natural Castor, situado en el mar frente a la costa de Vinaròs, mientras recaba información sobre la actividad sísmica detectada en la zona.
En los últimos días se ha detectado gran actividad sísmica en esta zona, coincidiendo con la inyección de gas en el almacén subterráneo Castor, situado a unos 25 kilómetros de Vinaròs.
El Instituto Geográfico Nacional ha registrado 252 micro-seísmos que prácticamente no han sido percibidos por la población, pero el pasado día 23 se registró uno de 3,6 grados en la escala Richter, que hasta hoy era el de mayor magnitud.
Pese a la orden ministerial, la empresa Escal UGS, que gestiona el proyecto, ha afirmado que la planta sigue funcionando con normalidad aunque sin extracción de gas, y ha mostrado su deseo de poder retomar la actividad normal en octubre próximo.
Asimismo, han asegurado que estos movimientos sísmicos están dentro de lo previsto en este tipo de actividad.
La empresa ha explicado que hace cinco años se instalaron dos sismógrafos en la planta, tras la firma de un convenio con el Observatori del Ebre, que "monitorizan" los trabajos en la planta.
Ahora los técnicos deberán determinar si los seísmos detectados se han producido por causas naturales o coinciden con los momentos en los que se ha estado extrayendo el gas.