El Gobierno insinúa que no frenará las subidas de la luz durante 15 años
El bolsillo no va a dejar de doler con el recibo de la luz. El Gobierno trabaja en una fórmula para poder contar con un precio competitivo de la electricidad, ya que durante los próximos 15 años los consumidores tendrán que afrontar una deuda de 24.900 millones que ya está colocada en el mercado a un interés medio del 5%.
Por ello, el ministro de Industria, José Manuel Soria, advirtió ayer en el Congreso de los Diputados donde defendió su reforma energética que "mientras el sistema acumule deuda no podrán caer los peajes" -parte del recibo que decide el Ejecutivo-.
A modo explicativo, el Ministerio de Industria está cerrando el grifo que supone el déficit de tarifa, pero el problema se centra en que la bañera ya está llena y hay que ir vaciándola.
Para ello, Industria subirá la luz de forma automática cada año cuando se genere déficit. A pesar de la reforma y de los diversos recortes, este desfase financiero es muy difícil de solucionar ya que la tarifa debe absorber unos 2.600 millones adicionales cada año en concepto de amortización de capital e intereses derivada de la deuda acumulada que ya está en el mercado.
Cabe destacar que entre este año y el próximo el Gobierno debe hacer frente a vencimientos por más de 4.500 millones. Para ello, el Fondo de Amortización del Déficit de Tarifa -organismo encargado de las colocaciones del déficit- ha realizado algunas emisiones con el objetivo de refinanciar la deuda y laminar el perfil de vencimientos.
A pesar de haber tenido un precio de la luz por debajo de su coste real, el recibo ha subido casi un 72% entre 2005 y 2012, tal como explicó el propio ministro a la hora de justificar sus recortes en los costes regulados del sistema -primas a las renovables, distribución y transporte-.
Apunta a las renovables
Según los últimos datos del regulador energético, los consumidores han pagado 11.823 millones desde 2003 a través del recibo de la luz para financiar el déficit de tarifa, que asciende actualmente a 26.062 millones de euros. Desde 2003 se han generado 34.960 millones de déficit, una cifra que se eleva a 36.796 millones desde el año 2000. Soria incidió en que el precio de la electricidad en España está "muy por encima de la media europea" y los costes regulados son superiores a los ingresos del sistema por culpa de un "crecimiento excesivo de determinadas partidas por decisiones políticas".
En este punto, culpó directamente a las primas al régimen especial -renovables y cogeneración-, que "se han incrementado un 700 por ciento, mientras la demanda eléctrica ha caído notablemente por la crisis".
El único resquicio que facilitaría una bajada de precio es que las subastas de Cesur (que fijan el precio de la energía cada trimestre y que supone en torno a un 40 por ciento del precio final del recibo) cierren con una fuerte bajada, como ocurrió en marzo de este año. No obstante, si a final de año los costes del sistema siguen siendo superiores a los ingresos Industria subirá automáticamente la luz. Además de la deuda con el mercado, los consumidores aún deben a las eléctricas algo más de 1.100 millones pendiente de titulizar, así como el déficit de tarifario que se genere este año.
En la última liquidación de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el desfase asciende a 4.519 millones hasta agosto. No obstante, a final de año no debería, en principio, haber déficit gracias a las medidas puestas en marcha por el Ejecutivo y el crédito extraordinario de 2.200 millones del Ministerio de Hacienda.
Desvíos sobre las previsiones
Pero el viento no está a favor del Gobierno para corregir este agujero, ya que hay unas fuertes desviaciones respecto a las previsiones del Ejecutivo. Para empezar, la demanda ha caído más de lo previsto y el sistema ha ingresado 519 millones menos que lo estimado a principios de año.
Además, el importe de las primas del régimen especial ascendió a 7.112 millones hasta agosto, un 9,5 por ciento más que lo previsto para el conjunto del ejercicio.
Esta desviación es consecuencia de la fuerte producción eólica e hidráulica en la primera parte del año, así como a la consecuente reducción de precios en el mercado mayorista eléctrico (pool) provocada entre otros motivos por la mayor participación de las renovables, que induce un incremento de las primas.
Frente a las siete enmiendas a la totalidad a la reforma energética presentadas por PSOE, Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), UPyD, CiU, ERC, BNG y Compromís-Equo, Soria abundó en que si un sistema energético tiene una razón de ser en cualquier país es que el factor de la electricidad no sea una restricción a la competitividad, por ello las medidas en marcha buscan controlar los incrementos de precio y lograr un modelo que dé energía competitiva".