Marichalar sigue teniendo escolta pagada con fondos públicos.
Jaime de Marichalar, exmarido de la infanta Elena de
Borbón, sigue teniendo protección del Ministerio del Interior pagada con dinero
público.
Jaime de Marichalar, exmarido de la infanta Elena de Borbón, sigue teniendo protección del Ministerio del Interior pagada con fondos públicos, pese a que desde hace c...asi seis años ya no es miembro de la Familia Real, de la que entró a formar parte el 18 de marzo de 1995, tras su boda con la Infanta. La Casa del Rey anunció en noviembre de 2007 el "cese temporal de la convivencia matrimonial" del exduque de Lugo y la primogénita del monarca, que dos años más tarde se convirtió en divorcio definitivo.
Sin embargo, agentes del Cuerpo Nacional de Policía siguen prestando labores de escolta al exyerno de don Juan Carlos en solitario, al margen de la proporcionada por la Casa del Rey cuando Marichalar acompaña a sus hijos, según han revelado a El Confidencial fuentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Tanto la Zarzuela como el propio Marichalar han confirmado esa circunstancia a este diario. El Ministerio del Interior y la Dirección General de la Policía, por el contrario, han preferido guardar silencio, argumentando que "nunca" se da información oficial sobre protección de personalidades "por razones de seguridad".
Lo que nadie ha sabido explicar es la razón por la que el Gobierno aún costea, con cargo a los presupuestos de Interior, la seguridad de Marichalar. Máxime cuando el departamento que dirige Jorge Fernández Díaz ya ha reducido tres veces en poco más de un año el número de escoltas asignados a altos cargos y personas amenazadas, recuperando más de 1.000 agentes empleados en esas misiones para tareas de seguridad ciudadana. Y prepara un cuarto recorte que aplicará de forma inminente, según un portavoz de Interior.
El exmarido de la infanta Elena cuenta, obviamente, con la tutela de varios guardaespaldas cuando se encuentra en compañía de sus hijos, Froilán y Victoria Federica. Ambos son nietos del jefe del Estado, y su protección, estén con quien estén, corre a cargo del Servicio de Seguridad de la Casa del Rey.
Según el convenio regulador del divorcio de los duques de Lugo, suscrito por la pareja en 2009, la custodia de los dos niños corresponde a la infanta Elena, mientras que Marichalar, además de pasar la correspondiente pensión de manutención, tiene derecho a un régimen especial de visitas.
Altos cargos sin escolta
Marichalar es una de las 330 personas que actualmente tienen en España protección dinámica, es decir, aquella en la que el protegido es escoltado por agentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado en todos sus desplazamientos. El año pasado, antes de que Interior pusiera en marcha la primera fase del programa de reducción de escoltas, los altos cargos y personalidades que contaban con custodia dinámica eran casi el doble: 613. En las próximas semanas se aplicará un nuevo recorte de protegidos y protectores, pero, según las fuentes consultadas, no afectará a Marichalar.
Además del exmarido de la infanta Elena, también cuentan con protección, entre otros, los miembros del Gobierno; los presidentes de comunidades autónomas; los delegados del Gobierno; los presidentes del Congreso, del Senado, del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Constitucional; el presidente y el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, además de un reducido grupo de magistrados y fiscales del Tribunal Supremo y la Audiencia Nacional. Y, por supuesto, todos los miembros de la Familia Real, incluido Iñaki Urdangarin.
La revista Vanity Fair recordaba en un número reciente que, tras divorciarse de la primogénita del Rey, Marichalar "perdió el ducado, el tratamiento de excelencia y la Grandeza de España", y añadía que su "estrella" personal había "menguado, y mucho: hoy sólo mantiene sus puestos de alta dirección en Loewe y en la Sociedad General Inmobiliaria, y vive en un piso de la calle Núñez de Balboa", más modesto que el lujoso dúplex que compartió con la Infanta en la llamada milla de oro madrileña.
Jaime de Marichalar, exmarido de la infanta Elena de Borbón, sigue teniendo protección del Ministerio del Interior pagada con fondos públicos, pese a que desde hace c...asi seis años ya no es miembro de la Familia Real, de la que entró a formar parte el 18 de marzo de 1995, tras su boda con la Infanta. La Casa del Rey anunció en noviembre de 2007 el "cese temporal de la convivencia matrimonial" del exduque de Lugo y la primogénita del monarca, que dos años más tarde se convirtió en divorcio definitivo.
Sin embargo, agentes del Cuerpo Nacional de Policía siguen prestando labores de escolta al exyerno de don Juan Carlos en solitario, al margen de la proporcionada por la Casa del Rey cuando Marichalar acompaña a sus hijos, según han revelado a El Confidencial fuentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Tanto la Zarzuela como el propio Marichalar han confirmado esa circunstancia a este diario. El Ministerio del Interior y la Dirección General de la Policía, por el contrario, han preferido guardar silencio, argumentando que "nunca" se da información oficial sobre protección de personalidades "por razones de seguridad".
Lo que nadie ha sabido explicar es la razón por la que el Gobierno aún costea, con cargo a los presupuestos de Interior, la seguridad de Marichalar. Máxime cuando el departamento que dirige Jorge Fernández Díaz ya ha reducido tres veces en poco más de un año el número de escoltas asignados a altos cargos y personas amenazadas, recuperando más de 1.000 agentes empleados en esas misiones para tareas de seguridad ciudadana. Y prepara un cuarto recorte que aplicará de forma inminente, según un portavoz de Interior.
El exmarido de la infanta Elena cuenta, obviamente, con la tutela de varios guardaespaldas cuando se encuentra en compañía de sus hijos, Froilán y Victoria Federica. Ambos son nietos del jefe del Estado, y su protección, estén con quien estén, corre a cargo del Servicio de Seguridad de la Casa del Rey.
Según el convenio regulador del divorcio de los duques de Lugo, suscrito por la pareja en 2009, la custodia de los dos niños corresponde a la infanta Elena, mientras que Marichalar, además de pasar la correspondiente pensión de manutención, tiene derecho a un régimen especial de visitas.
Altos cargos sin escolta
Marichalar es una de las 330 personas que actualmente tienen en España protección dinámica, es decir, aquella en la que el protegido es escoltado por agentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado en todos sus desplazamientos. El año pasado, antes de que Interior pusiera en marcha la primera fase del programa de reducción de escoltas, los altos cargos y personalidades que contaban con custodia dinámica eran casi el doble: 613. En las próximas semanas se aplicará un nuevo recorte de protegidos y protectores, pero, según las fuentes consultadas, no afectará a Marichalar.
Además del exmarido de la infanta Elena, también cuentan con protección, entre otros, los miembros del Gobierno; los presidentes de comunidades autónomas; los delegados del Gobierno; los presidentes del Congreso, del Senado, del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Constitucional; el presidente y el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, además de un reducido grupo de magistrados y fiscales del Tribunal Supremo y la Audiencia Nacional. Y, por supuesto, todos los miembros de la Familia Real, incluido Iñaki Urdangarin.
La revista Vanity Fair recordaba en un número reciente que, tras divorciarse de la primogénita del Rey, Marichalar "perdió el ducado, el tratamiento de excelencia y la Grandeza de España", y añadía que su "estrella" personal había "menguado, y mucho: hoy sólo mantiene sus puestos de alta dirección en Loewe y en la Sociedad General Inmobiliaria, y vive en un piso de la calle Núñez de Balboa", más modesto que el lujoso dúplex que compartió con la Infanta en la llamada milla de oro madrileña.